Un millón de toneladas de agua contaminada irán al mar en Fukushima
El 4 de julio, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) aprobó el plan de Japón de verter 1,3 millones de toneladas de agua contaminada tras una comprobación de dos años sobre las posibles consecuencias que podría tener dicha acción
Un pez con altos niveles de cesio radiactivo fue capturado cerca de las compuertas de salida de agua de la planta nuclear de Fukushima Daiichi, algo que ha generado una enorme preocupación ante el plan japonés de verter millones de toneladas de agua contaminada al océano.
La Compañía de Centrales Eléctricas de Tokio (en inglés, TEPCO) ha estado analizando los peces capturados cerca de la accidentada planta nuclear de Fukushima desde que los terremotos en la costa de Japón causarán destrozos y destruyeran el sistema de enfriamiento de la central en 2011, causando el fallo de tres reactores, según explica el medio ‘Global News’.
El mismo medio, ‘Global News’, explicó que el agua utilizada para enfriar el núcleo de los reactores se ha estado acumulando en unos 1.000 tanques de almacenamiento en la central, pero que dichos tanques están diseñados para alcanzar su máxima capacidad a principios de 2024.
Las autoridades japonesas esperan poder verter parte de esa agua contaminada con el objetivo de prevenir futuras fugas en el caso de que se produjera otra catástrofe y seguir trabajando en la desactivación de la planta nuclear.
‘Global News’ también añadió que el gobierno japonés planea verter toda el agua durante el transcurso de varias décadas a través de túneles subterráneos y espera comenzar las tareas este verano, algo que ha cabreado no solo a los países vecinos, sino también a los pescadores locales de la zona.
El 4 de julio, la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) aprobó el plan de Japón de verter 1,3 millones de toneladas de agua contaminada tras una comprobación de dos años sobre las posibles consecuencias que podría tener dicha acción, según el medio ‘The Hill’.
En un comunicado de prensa de la AIEA, la agencia señaló que el agua que iba a ser vertida había sido tratada mediante un «Sistema Avanzado de Procesamiento de Líquidos (ASPL)» que permitía eliminar casi toda la radioactividad, excepto el tritio que se encuentra en el agua.
Sin embargo, las autoridades japonesas tienen la solución para el problema del tritio y planean diluir el agua antes de ser vertida para establecer los niveles de elementos peligrosos por debajo de los estándares de regulación.
El director general de la AIEA, Rafael Mariano Grossi, dijo en un comunicado de prensa que la agencia había determinado que «el enfoque y las actividades de liberación de las aguas tratadas con ASPL llevadas a cabo por Japón están en línea con los estándares internacionales de seguridad más relevantes».
Sin embargo, la acción de verter tal cantidad de agua contaminada preocupa y enfada a los vecinos de Japón. El periódico ‘The Guardian’ informa de que Hong Kong ha amenazado con prohibir los alimentos importados de 10 prefecturas japonesas si el vertido se ejecuta como se planea.